La Generación Z ha transformado por completo la manera en que consume información. A diferencia de generaciones anteriores, que dependían de la televisión o la prensa, los jóvenes de entre 13 y 24 años prefieren las redes sociales y el contenido audiovisual de corta duración. Según un reciente estudio, el 23% de su tiempo de entretenimiento lo dedican a videojuegos, mientras que el 19% lo invierten en videos de plataformas como TikTok y YouTube. En contraste, solo un 17% aún ve televisión de manera habitual. Además, los algoritmos juegan un papel clave al personalizar el contenido, haciendo que las marcas deban captar su atención de inmediato para no ser ignoradas.
Uno de los hallazgos más relevantes del informe es la desconfianza de la Generación Z hacia las marcas tradicionales y su inclinación hacia los influencers y creadores de contenido. Un 46% de estos jóvenes prefiere informarse a través de redes sociales antes que en medios convencionales. Además, buscan que las marcas se alineen con valores como la sostenibilidad, el comercio justo y la diversidad. Por esta razón, las empresas que deseen conectar con esta audiencia deben apostar por la transparencia, la autenticidad y la responsabilidad social en sus estrategias de comunicación.
Otro cambio significativo es la manera en que buscan información. Aunque Google sigue siendo relevante para temas complejos como finanzas, tecnología y educación, las redes sociales han superado a los motores de búsqueda tradicionales en términos de preferencia. De hecho, el 46% de los jóvenes consulta primero plataformas como TikTok, que se ha convertido en la principal herramienta de descubrimiento de productos, moda y tendencias. Esto implica que las estrategias de SEO ya no pueden limitarse a Google, sino que deben adaptarse a TikTok, Instagram y YouTube para llegar a esta generación.
El informe también destaca el papel de la inteligencia artificial en la rutina digital de la Generación Z. El 66% la utiliza para redacción de textos y tareas escolares, y el 53% para buscar información, aunque siguen prefiriendo resultados verificados por humanos. A pesar de su integración en la vida diaria, esta generación aún duda de la precisión de la IA en noticias y considera que los contenidos generados por inteligencia artificial deberían ser revisados por periodistas.
Estos cambios representan un reto y una oportunidad para marcas y creadores de contenido. Con una audiencia que controla lo que consume y desconfía de las estrategias tradicionales, es fundamental generar contenido auténtico, aprovechar las redes sociales como motores de búsqueda y utilizar la IA como una herramienta complementaria sin perder el factor humano. Solo así será posible captar la atención de la Generación Z en un entorno digital en constante evolución.
